Till es uno de los personajes más completos y complejos de Alien Stage. Criado en el jardín de Anakt, su historia está marcada por el abuso y la soledad, lo que lo llevó a desarrollar mecanismos de defensa que moldearon su personalidad y sus relaciones. Aunque proyecta una fachada rebelde e impulsiva, en su interior es vulnerable y frágil.
Desde una edad temprana, Till fue víctima de maltrato por parte de su guardián, Urak. Este entorno abusivo lo obligó a refugiarse en su mundo interior, desarrollando una personalidad reservada, melancólica y, en ocasiones, agresiva. Su amor por la música se convirtió en su principal vía de escape, utilizándola para expresar emociones que no podía comunicar de otra manera.
En el artbook oficial de Alien Stage se destaca cómo Till canalizaba y drenaba su dolor a través de la música, aferrándose a pequeños símbolos de esperanza en su vida, como las flores rojas artificiales que el jardín de Anakt cultivaba, que asociaba con Mizi.
La conexión entre Till y Mizi es marcadamente unidireccional. Desde su estancia en el jardín de Anakt, Till idealizó a Mizi, viéndola como una luz brillante en su existencia sombría. Esta idealización derivó en sentimientos románticos profundos, aunque nunca los expresó abiertamente, a pesar de que eran evidentes.
En la segunda ronda de Alien Stage, Till le dedica una canción a Mizi, manifestando su devoción y admiración. Sin embargo, Mizi nunca correspondió a esos sentimientos, y su relación permaneció distante, con Till aferrándose a interacciones mínimas como si fueran momentos significativos.
Till e Ivan mantienen una relación compleja. Ambos han vivido dolor y rechazo, lo que les permitió forjar una conexión basada en un sufrimiento compartido. Sin embargo, sus formas de enfrentarlo difieren: Till encuentra consuelo en la música y en la idealización de Mizi, mientras que Ivan recurre al cinismo y a la manipulación. Esta diferencia provoca tensiones, especialmente durante la competencia.
Se sugiere que Ivan estaba enamorado de Till, y aunque este nunca pareció corresponder abiertamente, se cree que en algún momento logró identificar ese sentimiento, pero ya era tarde. Ivan se había sacrificado por él, bajo la idea de que "Ivan no podría vivir sin Till, pero Till sí podría vivir sin Ivan". Sin embargo, tras su muerte, Till queda profundamente afectado, como se muestra en la ronda 7. Luka se aprovecha de esta vulnerabilidad, imitando a Ivan para desestabilizarlo aún más.
En cuanto a Sua, su interacción con Till es mínima. Till muestra nulo interés por ella, centrándose únicamente en Mizi. Sua, por su parte, percibe a Till como alguien distante, aunque en ocasiones deja entrever cierta celosía, posiblemente por su cercanía con Mizi.
Till participa activamente en Alien Stage, usando cada actuación como una forma de liberar sus emociones reprimidas. En la segunda ronda, su canción dedicada a Mizi expone la profundidad de sus sentimientos y su deseo de ser visto y amado por ella.
A medida que avanza la competencia, Till enfrenta desafíos que lo obligan a confrontar su dependencia emocional y sus inseguridades. Su evolución sobre el escenario refleja su lucha por descubrir quién es más allá del amor no correspondido y por alcanzar una versión más auténtica de sí mismo.
Till representa la lucha interna entre el anhelo de conexión y el miedo al rechazo. Su historia en Alien Stage es un testimonio del impacto del sufrimiento y la soledad en la construcción de la identidad. A través de la música, Till busca redención y comprensión, aunque a menudo se pierde en sus idealizaciones y temores. Su viaje es una exploración profunda de la vulnerabilidad humana y de la necesidad de encontrar sentido en un mundo que frecuentemente parece indiferente.